A la hora de elegir la configuración para un equipo, la fuente de alimentación es uno de los componentes menos cuidados por la mayoría, conformándose con que simplemente cumpla su función y que todo lo demás funcione.
Esto es un gran error, ya que una buena elección en este aspecto, puede influir directamente en el rendimiento del ordenador y protegerlo eficazmente de subidas de tensión (PCF activo), además de contribuir a la ergonomía si no producen demasiado ruido sus ventiladores.
Levicom a echo un gran trabajo con esta fuente de alimentación, el control de ventiladores (CFC) cumple su misión de forma excelente, ya que el nivel sonoro es muy bajo, sobretodo si se tiene en cuenta la gran potencia que ofrece, y el detalle de mantener los ventiladores encendidos incluso después de apagar el equipo (que no desconectarlo de la red electrica, evidentemente...), asegura que la temperatura en el interior está bajo control en todo momento.
Los 420w son más que suficientes para equipos con gran carga de consumo, especialmente en el caso de los que equipen un procesador Pentium 4 y una tarjeta gráfica de alta gama.
En la prueba que se le ha realizado, en la que se han colocado 6 unidades de 5 ½, 4 de ellas discos duros, los voltajes no se resintieron en absoluto y en ningún momento se percibieron síntomas de una carga excesiva.
Otro detalle a tener en cuenta son los 2 conectores Serial-ATA, ya que la mayoría de discos duros no vienen con convertidores de molex 4 pines a SATA y hay que adquirirlos por separado.
Por todo esto recomendamos esta fuente de alimentación para equipos con gran carga de consumo, dada su alta potencia y gran relacción calidad/precio, aunque si te gusta el moding también hay disponible otro modelo con ventiladores iluminados por un poco mas de los 66 euros que vale esta fuente de alimentación.
A favor:
- Precio.
- Bajo ruido gracias al CFC.
- Gran potencia.
En contra:
- PFC pasivo.
Enlaces de interés:
CoyotesHardware.com
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